Tu voluntad, Señor, no la mía. ¡por oscura que sea! Guíame con tu propia mano, escoge la senda por mi.
El reino que busco es tuyo, así que haz que el camino que conduce al mismo sea tuyo, de otra manera
con certeza me descarrilaré.
No mía, no mía la selección, en cosas grandes o pequeñas. ¡se tú mi guía, mi fuerza, mi sabiduría y mi todo.
2018-03-01